jueves, 15 de enero de 2015

Rodolfo Godino, Para escribir el poema


PARA ESCRIBIR EL POEMA


The poem
is complex and the place made
in our lives
for the poem
W. C. Williams

1

Esta es la ley callada:
por más que escandalice,
la verdad interior
—que traba la lengua y anda por su túnel
resistiendo a sí misma—,
debe ser descubierta.

Eso no daña el prestigio
del corazón multiforme,
que debe insistir
y ser escuchado aun como culpa,
omisión,
             error, miedo, memoria
o sed inconfesa del cuerpo:
la historia de una combustión
siempre acorralada.
De lo contrario sólo se alumbran
fenómenos de oficio,
ningún animal completo.

Esas reticencias glaciales
consumen su invalidez, y su sanción
es muerte verdadera.
                                   Aunque suene
trágico, no hablo del infierno
sino de palabra estéril.


2

Sin las cosas no hay poema.

Un hombre bajo hechizo
registrando una revelación personal.
Esa es, aunque no pueda
ser probada, la ley de lo creado
infinitamente repetida:
podrán engarzar el cuerpo
en los viajes de la savia, de la luz,
filtrando violencia y acidia
en las crisis graduales de la carne
no humana del mundo natural.

Amándolas, sin alegorías,
serán parte, maderas, flores,
unidos en los cambios
y en el renacimiento, en los ciclos
de silenciosas convulsiones.
Nunca la vida pequeña
será suficientemente expandida.


3

Con escrúpulos no hay poema.
Cuando la realidad cuestionada
se retire, lo ambiguo crecerá
en el exceso de conciencia,
sin discreción, aceptándose a sí mismo.

Mientras el mundo se disipa
y aun inclinados a lo juicioso,
retengan: lo fantástico se ajusta
por la razón; el gobierno
combinatorio de lo mágico se ejerce
puertas adentro.

                         Lo que merezcan
y lo que alcancen no serán tormentos:
la humillación del oficio siempre guarda
un rédito solemne.

                           En la pelea
con la palabra inhábil, partes
del corazón y la verdad se pierden;
la imprecisión del espíritu
será imprecisión en la palabra.

Sin artificio no hay poema.


Puntas del Campanero.
Minas, Uruguay, 1993


De: “Centón”, 1997. En: “Viaje favorable”, Ediciones del Copista, 2004
Rodolfo Godino (San Francisco, Córdoba, 1936 – Buenos Aires, 2015).

Foto: RG

2 comentarios:

Rolando Revagliatti dijo...

Extiendo acá mi pésame a los familiares y amigos de este notable poeta: Rodolfo Godino.


Rolando Revagliatti

*

José María Pallaoro dijo...

Me enviaba sus libros por correo, el gran poeta que ayer partió.
Nunca más la maravilla de su poesía en la puerta de mi casa.
Ahora solo en el interior de mí.