'HE AQUÍ UN DÍA
que
nos da grandes esperanzas'. Tomarlo
desde lejos.
No hay dos días iguales
pero es inútil comparar: ahora
o nunca.
Hacia la noche 'hemos tenido buen viento
pues varios inciertos han sido fijados':
la polenta está espesa y sabrosa
y las escarolas a punto,
la llama de la vela
arde sin parpadear.
Quedarse sentado en la gruta
y dejar de pensar
es lo más conveniente —eventualmente
la roca cede.
desde lejos.
No hay dos días iguales
pero es inútil comparar: ahora
o nunca.
Hacia la noche 'hemos tenido buen viento
pues varios inciertos han sido fijados':
la polenta está espesa y sabrosa
y las escarolas a punto,
la llama de la vela
arde sin parpadear.
Quedarse sentado en la gruta
y dejar de pensar
es lo más conveniente —eventualmente
la roca cede.
Y
de todo el enredo,
de
las cargas, los cargos, la pereza,
nos
descarga, sin tiempo la belleza,
gratuitamente.
SUBE EL GATO HASTA EL TECHO
y halla gatos. ¡Laurel,
escarmiento de los poetas!
Dejar el gato abajo y escalar
el techo de la noche. Los gatos
no son alpinistas.
¡Oh noche,
pensamiento callado,
oh noche de la noche
pensamiento
no pensado!
Dice el gato a la noche:
—¡Oh Pensamiento,
piensa (en mí)
cuando no pienso!
y halla gatos. ¡Laurel,
escarmiento de los poetas!
Dejar el gato abajo y escalar
el techo de la noche. Los gatos
no son alpinistas.
¡Oh noche,
pensamiento callado,
oh noche de la noche
pensamiento
no pensado!
Dice el gato a la noche:
—¡Oh Pensamiento,
piensa (en mí)
cuando no pienso!
UNA MORA
Para fiesta de frutas,
una mora. Sus mínimos toneles
rezumantes
estimulan un punto. No es un punto
de continencia ni es un punto
de destemplanza: es la punta
del instante. Su estilo,
la atención. Se difunde,
en la fruta de los vientos,
por la mente. Palabras, pensamientos
se borran. Su conciencia
es el sabor. El árbol
de la bodhi y el orgasmo
del león
se confunden. Del sueño
de la mosca
se despiertan dragones.
Para fiesta de frutas,
una mora. Sus mínimos toneles
rezumantes
estimulan un punto. No es un punto
de continencia ni es un punto
de destemplanza: es la punta
del instante. Su estilo,
la atención. Se difunde,
en la fruta de los vientos,
por la mente. Palabras, pensamientos
se borran. Su conciencia
es el sabor. El árbol
de la bodhi y el orgasmo
del león
se confunden. Del sueño
de la mosca
se despiertan dragones.
En: “La atención. Obra reunida II
(1960 – 1980, poemas verbales - poemas plásticos)”, UNL, 1999.
Hugo Padeletti (Alcorta, Santa Fe, 1928).
Poeta y artista plástico. Reside en Buenos Aires.
Imagen portada: dibujo de HP.
No hay comentarios:
Publicar un comentario