sábado, 27 de marzo de 2021

MARIO PORRO y Tropos: Un giro dentro de la celebración por José María Pallaoro



(Publicado en el diario El Día de La Plata, el 14 de enero de 2001)


Tropos Giros 
El continuo suceder de nuestro ser 
Vórtices que se comprenden así mismos 
y se animan a lugares no frecuentes 
pero desean que el lector los piense y los sienta en su interior”, 

escribe Mario Porro (Trenque Lauquen, 28 de marzo de 1921) a manera de Justificación de su último libro de poemas. Obra surgida de un espíritu moderno, Tropos, si bien es una continuación de “Sucesión del ser” –Sucesión del ser II, aclara el autor–, es un libro diferente. En Tropos perduran los temas claves del poeta: el Ser, el Tiempo, el Amor, el Lugar, la ternura, el abandono, la soledad, la infancia, el mar, la interioridad. Pero ahora Mario Porro introduce en los poemas una metafísica distinta, como un copista de los antiguos troparios de la iglesia. De ahí su título, emparentado desde su intencionalidad musical con el tropario gregoriano. En todos los textos hay una sucesión de líneas que en apariencia escapan a la realidad del poema:

Hubo amores al alba? 
Manifiestos?” 

Ese es el tropos. En el canto gregoriano cuando aparece la voz, la voz sorprende, y plantea o pregunta algo que el coro no ha dicho. Porro agrega el elemento metafísico. Un giro dentro de la celebración: 

Oboe sin aire la tristeza pasa entre las hojas 
Sólo mi fervor estremece...”

Es extraordinaria la forma con la que el autor de “Búsqueda por el amor” encaró la arquitectura del libro. Ante la conquista de una idea se impone la necesidad perentoria de hallar otra, incorporando permanentemente el sentir, y es ese sentir el que expande el alma del poeta: 

 “Amor mío no te duelas
por mi soledad 
 Ella cuida de mi asombro 
Me protege de la distracción 
Anula mi ser a su estar...” 

 Libro dedicado a su madre, centro de toda su obra. La “centreidad” –palabra tomada de Teilhard de Chardin, y fundamental en la estructura de su poética– indica que a medida que el centro se va achicando, se van reuniendo todas las cosas. Para el poeta las cosas no se pierden, se reúnen. A diferencia de sus libros más herméticos –“La vigilia y la roca”; “Entremundo”; “Mundo despierto”– hay una mayor claridad en la construcción de los poemas, y en cómo llegan al lector:

“¿Por qué estás solo? 
Sin embargo vives envuelto en los demás 
 Cómo ellos te ahogan 
Cómo sin ellos mueres” 

Los poemas de Tropos deben leerse línea por línea, para descubrir en la palabra, ideas y emociones. Poemas dotados de profunda interioridad y sensibilidad, donde nunca está ausente el elemento dramático, la tensión. Tanto el significado, como el símbolo y el sonido son las causales que producen en nosotros el asombro cobijado en el misterio. Hay que recorrer el poema una y otra vez, dejarlo, volver a él, para vivir, retornar al lugar, y celebrar la poesía. Porro, poeta moderno comprometido con el lenguaje, sabe que toda palabra es metáfora. Su obra es una poética inagotable que existe y se expande en la medida de la capacidad de quien mira y se compromete. 


 ___ El poeta Mario Porro murió en City Bell en la madrugada del 2 de diciembre de 2001. Ese mismo día escribí este texto:

Mario Porro 

La lluvia trajo 
junto al cansancio de la tarde 
La noticia inesperada 
Una soledad infinita
---

6 comentarios:

José María Pallaoro dijo...

Hace muchos años me propuse difundir la obra de Mario Porro. Y de a tranquitos lo estoy haciendo. Mi idea es la de subir en POESÍA LA PLATA completos los primeros libros de Mario (ya se puede leer “La vigilia y la roca” de 1957 -edición Poesía Buenos Aires-). Para AROMITO realicé esta selección de poemas de “Sucesión del ser” y de “Tropos”. También pueden encontrar algunos textos en POESÍA CITY BELL y, escarbando un poquito, en Los ojos.
Mario Porro aún es un poeta desconocido. Ojalá esta iniciativa sea el puntapié inicial para conocer y reconocer a uno de nuestros grandes poetas.

Anónimo dijo...

Azar del mundo + engañosa afinidad...
soledades unidas + dulce sensibilidad...
Tierna sensación, efímera alegría
diálogo, calidez, fantasía.
¡Qué dolor para la rama
la búsqueda del ave, incesante, del que no ama!...
Estremecimiento de la decepción,
misterio de la negación...
"eres libre... sin rencor,
quedo sola...¡repetido dolor!

hilda

Anónimo dijo...

Gracias, sencillamente por acercar la poesía de un poeta entrañable al cauce del mundo.

Anónimo dijo...

GRACIAS POR PARTICIPARME DEL HOMENAJE
DELFINA ACOSTA, EMBAJADORA DE POETAS DEL MUNDO EN EL PARAGUAY

Anónimo dijo...

muchas gracias por enviarme momentos que me inundan de poesia .cariños.Cristina Sathicq.

Anónimo dijo...

José María me recomendó hace más de un año que lea a Mario Porro.Fue para mí una experiencia muy importante. Sigo leyendo y releyendo incansablemente su obra.Aprovecho esta posibilidad para agredecerle ese acto que refleja su gran generosidad y su compromiso real con lo verdadero de la poesía.

"Cuál vida
es la vida
¿El pájaro
que sigue
la hoja
que cae?"

Mario Porro.