sábado, 14 de abril de 2012

Anibal Jorge Sciorra – Para que todo siga igual



LLUEVE BUENOS AIRES


llueve buenos aires
en la soporífera tarde de marzo

llueve las inundancias de siempre
lenguetea cordones y baldosas

se entretiene con mocasines baratos e imprevistos

llueve y navega inmiscuyéndose en cada junta, en cada agujero secreto
llora como un tango penas que no valen ni una sola pena

llena de miedo zócalos y escalinatas
apaga luces de semáforos indicadores de la nada

se derrama entre cabellos de muchachas impudentes
vuela paraguas de señores rectos, de trajes y corbatas

desarma peinados de señoras ofuscadas
juguetea con niños desprovistos de temores

llueve buenos aires y luego se detiene

                                      para que todo siga igual



Anibal Jorge Sciorra (Buenos Aires, Argentina, 26 de agosto de 1952 – 13 de abril de 2012).
Foto: FB. Poema del blog “Sciorra”.

3 comentarios:

diana poblet dijo...

Gracias José María, aún con el escalofrío que dejó su partida, aún aguardando, tal vez despierte, aún leyendo sus cosas desde mis archivos y sin comprender la terquedad de la muerte.
Gracias porque esta foto siempre me hacía reír, yo le decía que parecía el Quijote con ese sombrero de LP y a él le daba mucha gracia y así quiero recordarlo, no fui a ver la cajita que contenía la mentira, no asisto a velorios ni paseo por los cementerios,no hay nada allí. Todo lo que fue lo llevamos nosotros, cada uno de los que hemos disfrutado su Ser de buena gente. Con todo eso me he quedado y con su palabra, he disfrutado de su paso por mi vida y no le permitiré morir desde mi recuerdo.
Con mi abrazo y algo de tristeza.
d.

José María Pallaoro dijo...

Un fuerte abrazo, Diana, y la tristeza compartida.

silvia loustau dijo...

Ver esta foto de Anibal, releer sus poemas, es un amigo al que extraño, nos escribiamos casi todas las semanas. En Baires yo iba a su casa y el venia a Mardel, a la mía...no puedo acostumbrarme a la ausencia, ayer me encontre pensando que le iba a escribir...en septiembre iba a venir para caminar por la orilla del mar...Gracias josé por este recuerdo...un gran abrazo

Silvia Loustau