martes, 31 de enero de 2023

TERESA MELO Mi mar vacío

City Bell, 30 de enero de 2023



BARQUITOS DE PAPEL 

Yo no quería ser reina 
yo no quería la sensación de hartura. 
En el ojo que mira la mascarada 
yo me quise quedar detrás de la retina . 
No quería mirar escenarios de atrezzo 
no quería mirar los lugares comunes.

Barquitos de papel puestos en fila 
me conjugan el verbo voy/ me vas/ te van/ se. 
Yo no quería ver cómo se iban 
casa quien a su modo y a su aire. 

Partía Albis Torres San Lízaro arriba 
en un barquito frágil vestido de domingo: 
arrastraba mi caja terrenal, 
ya no hay conversaciones/ 
ya no hay carteles donde Lauren Bacall 
entorna los ojos en el humo/ 
no hay agua lamiendo los contornos del mapa personal

Con música marcial se despedía el abrazo persona. 
No escribo. No describo. 
El amor rellena estas palabras con una tinta espesa.

Se iban en barco casi desvanecido 
los que me dejaron la mano del adiós a medio levantar, 
no quería ver cómo partía n una vez otra vez 
ángel, salvador, karim, ignacio. 
También me llamaron libertad 
y eran belkys, raquel, con rostro ciego 
enseñando su modo: 
cristal de agua/ pedrada líquida 
y sonreír.

Seguramente encontraron “días espléndidos para morir” 
acaso un día de no querer ser reina 
de no estar sobre el mapa como un buda feliz.

Barquitos de papel puestos en fila. 
También tendremos hambre de querer. 

Yo no quería ser reina. 
Ahora soy esta pieza cualquiera 
diciendo adiós ante mi mar vacío.


     Escribe Margaret Randall: “Con una profunda tristeza me enteré esta mañana de la muerte de Teresa Melo, poeta cubana de gran profundidad y poder cuyo hermoso libro LAS ALTAS HORAS / LAS TARDÍAS HORAS tuve el privilegio de traducir. Fue publicado en una edición bilingüe el año pasado por Katakana en Miami. Teresa nació en 1961, escribió para varias revistas de cultura cubana y trabajó en la radio además de su vida como poeta. Muchas de nuestras voces de clarión se han ido recientemente. La extrañaremos.”

     En revista Ateneo / Tres poetas cubanos de los 90 (Teresa Melo, Óscar Rojas Olsina, León estrada) / Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, ULPGC / 
Teresa Melo (Santiago de Cuba, Cuba, 11 de octubre de 1961 - 30 de enero de 2023) / Poeta, narradora, editora / Imagen: jmp / 
Los autores y textos forman parte de estudio en ejercicios de taller, y su destino es solo para este objetivo.- 

jueves, 26 de enero de 2023

JORGE ALEMÁN Iguanas




IGUANAS

II

          Visión de la Diosa Iguana. Enviciando el canto en que me empeño como un sagaz impostor de las mareas. Ah mares celestes… He visto en ellos ángeles voraces pidiendo por mis brazos para calmar a las sirenas. Y en el viento hecho lenguas. Remolino de reptiles meciendo mi alma. Oh iluminado. 
No me hablen de altisonantes caballeros de venas débiles y pálidas olfateando los perfumes sombríos en la falda de la Marquesa. Ah violines grotescos. Nunca besaré los mármoles del éxito mundano. Y no me nombren al amor batido con sólo dulzuras del verbo. Porque yo nunca he comido de ese pan. Amo a los héroes de lo oscuro y me condecoro como príncipe del fango. Y a estas sagradas, hembras aventuradas de mi zona, pequeñas y altas, delgadas y rosadas. Y a este humo violeta lamiendo mis pulmones, no para adormecerme, sino para gritar mi estruendo en alcobas y montañas. Para solear la altivez y lo profundo del nacimiento. 
Del nacimiento en flores de Demencia. 


III

          Iguanas del crepúsculo, de la bestia de oro soñándose sobre el lago, de las locas travesías en el amor. Más poseerte es una alianza con el Dios que habita en tu médula. 
Y es éste mi deseo, rojo y atormentado, como un archipiélago del pecado donde renacen calores olvidados. Como trompetas que fulgen un majestuoso desacato. 
Y es éste mi deseo. De leches retenidas en el fruto. De islas arrasadas. 
Será mi santa aquella que se prosterne frente a mi ardor. 
Ah violenta hembra de Sinfonía. 


IV 

          Soy el que repite la pasión en todo el sinsentido. Lo almendrado, lo fascinado de nuestros roces alertó a dioses y a tontos. Preguntaron por salmos de la carne y tendones del placer. Y tan solo dije que yo era esclavo en mis dominios. 
Ah Iguana de las Marías. Bestia de mi tierra condenada. 
Ya no una sombra para ofrendar al Sol. Ya no la soledad tan contraria al pesado calor de tu cuerpo sobre mis desvaríos. Ya no el recuerdo de un recuerdo. Ahora loca mujer encontrándose con su siervo, este gentil e iracundo pastor de lo indebido. Para distinguir a esta isla de otras islas. A este cuerpo de otros cuerpos. 


DE LAS DISTANCIAS EN EL AMOR

          Tales distancias no existen 
porque puedo escuchar el vértigo de tu jadeo 
                                       en simulacros de zozobra 
aun en noches lejanas donde en las bodegas nos dicen 
“otra es la historia y todo ha sido olvidado” 
aquellos pliegues y mis dilemas de marino 
          envejecido prematuramente 
como esos frutos que hacia las palmeras ensayan 
          su joven caída 
y tus nalgas 
frescas y lamidas con todo el desacato de la leche 
con el desacato de los tambores insinuando los mitos 
          de la selva 
como mi corazón golpeando y azotando tu cuerpo 
          en el descanso
Y toda mi imaginación para sólo decir 
que si un poeta ama a una mujer 
                         jamás es olvidado 
Entre tollas y vapores tu cuerpo mostrando 
con sales sabrosas perfumando un clímax salvaje 
Nosotros 
tan solo dos personajes confundidos en el relato 
Pero tanto el amor y tan majestuoso 
como el que llega a las espléndidas ciudades 
encandilando con sus tatuajes de victoria 
Y esas repeticiones de la sangre y de las palabras 
donde todo parece ya sucedido 
y siempre auspiciando un vigor nuevo para mi piel 
                  que se te hiciera intolerable 
Ah aquellas maneras de penetrarte queriendo 
          alcanzar la verdad 
y trizar las copas y romper las vajillas 
porque todo era una antigua canción 
de bufones solitarios 
de tontas costumbres tocadas en cualquier historia 
porque todo era grande pero bastaba una guitarra 
          para contarlo 
Entre nosotros todos los vinos y sus vidas 
pero acaso también la muerte en dársenas lejanas 
y todos los candores retratados en el momento 
          de su corrupción 
en el momento en que los labios besan para mostrar 
          sus hemorragias 
Aquellas pinturas donde tus selvas fueron ya trazadas 
                             en sus itinerarios más fogosos 
antes que mis manos la indagaran 
Esos pintores que imaginan colores para nuestros actos 
y nuestros sueños de aves perseguidas 
por inviernos de crueldad y morbosos cazadores 
Ah oscuros molinos de nuestro tiempo 
agitando las mareas y nuestros pánicos por la orfandad 
donde un águila fénix soberbia y furiosa 
muere en una plegaria sórdida 
como una niña idiota durmiendo entre los parques 
Entonces arrastrarnos embriagados 
porque es preciso ser sensibles a los árboles las leyes las lluvias 
porque es obligación descubrirle arco iris a la noche 
y fascinarse por los bellos gestos de amor entre los lobos 
para no decidir nuestro destino de precarios extranjeros 


SALMO 

          Dulce me sea la estación del insomnio 
con sus eternos antojos de abandono 
Donde la muerte -senos amarillos al viento- 
olvidaba mi nombre en su manuscrito sobre los bancos de la terminal 
Estación del no regreso para la memoria del viajante 
Calmos sean los mares para mi despertar 
mientras cante su pálida espuma 
el episodio en que se ama el ensueño de la víctima 
Tenga ligeros los pies y el alma sea alada 
para huir de lo que intentan arrebatarme el poema 
donde ya no hay diferencias entre un rostro y un vaso de agua
y galaxias de odio y misterio diseñan al roedor propicio para mis miembros 
Recuerdo los viejos burdeles del otoño 
donde mi estilo era el de los marinos y los desequilibrados 
donde supe que todo hombre es un extranjero 
un extraño en su propio lecho 
un extraño que se abate de canciones imbéciles en los deseos de la extraña 
Sea el que prefiere la pasión antes que el balbuceo de los días tranquilos 
Contenga mi alma el último pecado 
que el Señor no se atrevió a escribir sobre la roca 
y que no haya más dioses que los que encuentro en la taberna 
los que beben nuestro vino 
desean a nuestra mujer 
                 y nos miran a los ojos 


En Iguanas, Ediciones Grupo Cero, Buenos Aires, 1975 (pie de imprenta 8 de enero de 1976) / Tapa e ilustraciones de interior: José Luis Poy / Selección de poemas: José María Pallaoro / 
Jorge Alemán Lavigne (Buenos Aires, 30 de marzo de 1951) / Psicoanalista, escritor, poeta / Fotos y video: jmp / 

José María Pallaoro lee un poema de Jorge Alemán / 



jueves, 19 de enero de 2023

DIANE DI PRIMA Sombras que caen sobre los cruces del camino



CARTA REVOLUCIONARIA # 2 

El valor de una vida individual es un credo que nos enseñaron 
para infundir miedo e inmovilidad, “vives solo una vez” 
una niebla en nuestros ojos, somos 
infinitos como el mar, inseparables, morimos
un millón de veces cada día, hemos nacido 
un millón de veces, cada respiración y muerte: 
levántate, ponte los zapatos, 
empieza, alguno terminará 

Tribu 
un organismo, una sola carne, respirando júbilo mientras 
las estrellas irradian el destino que desciende sobre nosotros, 
vamos, estrecha las manos, haz lo tuyo, miles de hijos 
lo verán cuando tú caigas, crecerás 
mil veces en los vientres de tus hermanas 


CARTA REVOLUCIONARIA # 21 

¿Puedes 
poseer tierra, puedes 
poseer casa, poseer derechos 
sobre el trabajo de otros, (acciones o fábricas 
o dinero prestado a interés)
y qué piensas del 
producto de lo mismo, cosechas, autos
aviones arrojando bombas, puedes 
poseer propiedades para que otros 
te paguen renta? ¿y a quién 
pertenece el agua, a quién 
pertenecerá el aire cuando enrarezca?
los indios americanos dicen que un hombre
no puede poseer más de lo que logre cargar 
sobre su caballo.


CARTA REVOLUCIONARIA # 30

(A aquellos que vendieron el verano revolucionario del 68)

acuérdate de usar un sombrero, si tienes un sombrero 
y mete en él su pelo, si es pelo largo 
o no lo hagas, usa zapatos si está nevando y tienes zapatos 
acuérdate que ellos compraron todos los líderes, sé un líder 
si quieres ser comprado, pero acuérdate de 
contar la verdad, antes de que te compren, cuenta la verdad 
en voz alta, y los chicos te escucharán, no escucharán tu dinero 
cayendo sobre el mostrador de la licorería, día tras día 
no escucharán tus pesadillas de traición y tortura 
no escucharán tu mercedes, escucharán solo la verdad de la que hablaste 
te creerán y te honrarán después de tu muerte, abatido 
por aquella bala de la cia que no puedes eludir precisamente por tomar su dinero 
ellos te creerán y HARÁN AQUELLO QUE TÚ DICES 
NO AQUELLO QUE TÚ HACES 


AVE

oh hermanas perdidas de la luna
cabello en creciente, mar bajo los pies vagan
con velo azul, con hoja verde, con chal andrajoso vagan
por la Avenida A, por la avenida Bleecker vagan
por la calle Rampart, por la calle Fillmore vagan 
con corona de flores, con aliento enjoyado vagan

     huellas
          brillante madre perla
                             detrás de ti
ojos de piedra lunar
     donde la luna crece

con guantes, con sombrero, en harapos, en pieles, en abalorios
bajo la luna menguante, pelo chorreando en la lluvia negra
gimiendo junto a perros extraviados, silbando en los portales
son sombras que caen sobre los cruces del camino, las carreteras

cortando el tránsito vagan
escupiendo vagan
mascullando y gritando vagan
envejecidas y hablándose a sí mismas vagan
con ojos errante vagan
calientes por un amor fugaz vagan
llorando sus muertes

     caminan desnudas
     caminan envueltas en largas vestiduras
     caminan amortajadas
     caminan retrocediendo

        hambrientas
        hambrientas
        hambrientas

las escucho chillando
las escucho cantando
las escucho maldiciendo
las escucho rezando

        se acuestan con el unicornio
        se acuestan con la cobra
        se acuestan con el pasto seco
        se acuestan con el yeti
        chasquean los largos penes de los sátiros con sus lenguas

                están armadas
                conducen carros de guerra
                se alzan como torres
               son pequeñas
               se agazapan en los flancos de las colinas
               fuera de los vientos

preñadas vagan
descalzas vagan
apaleadas por borrachos vagan

               matan en mesas de acero
               nacen en lechos negros
                     el feto que arrancaron se endurece en la nieve
                     se levanta como la luna nueva
                     gimen en sus sueños

escarbando ñames vagan
buscando droga vagan
jugando con pájaros vagan
picando piedras vagan

          camino la larga noche buscándote
          trepo la cresta del mar buscándote
          me acuesto sobre la llanura, golpeo las puertas de piedra
          invocando tus nombres

          eres coral
          eres lapislázuli y turquesa
          tu cerebro se retrae como concha
          danzas sobre las colinas

               giras mujer de ardua sustancia
               bailas en los subterráneos
               te despatarras en los conventillos
               los niños lamen tus pezones

               eres las colinas, forma y color de la meseta
               la carpa, la tienda de cueros, la choza navaja
               los mantos de búfalo, la colcha, el tejido de Afganistán
               eres el caldero y la estrella nocturna
               te levantas sobre el mar, y cabalgas lo oscuro

me muevo en ti, ilumino el fuego nocturno
hundo mi mano en ti y como tu carne
eres mi imagen en el espejo y mi hermana
desapareces como humo sobre las colinas brumosas
me guías a caballo por bosques de sueño
larga madre gitana, apoyo mi cabeza sobre tu espalda

     yo soy tú
     y debo convertirme en tí
     yo he sido tú y debo convertirme en tí
     yo soy siempre tú
     yo debo convertirme en tí

        ay-a
        ay-a ah
        ay-a
        ay-a ah ah
        maya ma maya ma
        om estrella madre ma om
        maya ma ah


Escribe Diana Bellessi (1984): “Cartas revolucionarias…, dedicado a Bob Dylan y a toda una generación adolescente en la década del sesenta, fue ampliamente conocido entre los jóvenes de San Francisco. En un tono sencillo y un tanto discursivo, se niega a participar de un sistema social y una mentalidad gobernante que atenta contra la vida humana y el equilibrio todo de la naturaleza. Se niega, como miles de jóvenes lo hicieron, a participar en guerras genocidas, en la opresión de las minorías etno-culturales o sexuales, en el saqueo o envenenamiento del medio ambiente, en los fenómenos alienantes de la propiedad privada. 
Vinculada con los poetas beatniks –Ginsberg, corso, Ferlinghetti-, di prima explora otras regiones concernientes a la realidad que le toca vivir desde su condición femenina. Bajo la advocación de ésta última elabora el largo poema `Ave´, un canto shamánico donde la mujer, fluyendo en infinitas figuras se despliega y se reintegra…”. 

En Contéstame, baila mi danza / Seis poetas norteamericanas / Selección, traducción y notas de Diana Bellessi (Zavalla, provincia de Santa Fe, 11 de febrero de1946) / Ediciones Último Reino, Buenos Aires, Argentina, 1984 / Foto: jmp / 
Diane di Prima (Brooklyn, Nueva York, EEUU, 6 de agosto de 1934 - San Francisco, California, 25 de octubre de 2020) / 
Los autores y textos forman parte de estudio en ejercicios de taller, y su destino es solo para este objetivo.- 

domingo, 15 de enero de 2023

BLANCA VARELA Un poema como una gran batalla

Blanca Varela x Baldomero Pestana, circa 1960



EL PASEO

Vamos, la luz cambia, 
la luz y el viento nos esperan creciendo.
Es hacia la noche donde vamos,
al frescor de la sombra continua,
a beber de los frutos vivos
que penden de ramas increíbles.

Ahora hay tal certeza
de que un pie sigue al otro
y el sol y la luna hacen el día juntos
y el reposo no es terrible.

No es éste el lazo
ni tú eres hoy la presa pequeña.

De Ese puerto existe, 1949 - 1959


NO ESTAR

No estar. No estar. No estar. 
Un reflejo a la entrada de la cueva,
la carrera en medio del día,
la manada invisible,
la nube de polvo.

Desde el fondo tirar la red.
¿Quién cae? ¿Quién vive?
Esto es la noche. Esto soy yo.
No quiero ver las estrellas,
no quiero ver lo que ha de morir,
ni imaginar tu rostro
ni moverme hacia lo que amo.

Inmóvil tras mi cuerpo soy un río que crece,
que avanza en la noche.

Tiempo, rostro de limo, espejo trizado.
Repite este aire caliente que gira,
hazlo una piedra,
un círculo en el agua que me devora.
Lánzame mil veces de espaldas, despéñame,
lléname de ojos,
devuélveme mis palabras,
mis pensamientos, más violentos que la luz.

Recuerdos donde tú eres yo
Y haces el mismo gesto de amor en la oscuridad.

Voy hacia la ventana,
me asomo al día negro y allí estoy,
al centro de la tiniebla.
Algo roto, sustancia herida,
desgarrón luminoso súbitamente borrado,
calor apartado de los labios, luz ambigua,
noche de fuego y hielo, silencio,
muro de ecos, ser de espaldas.   

De Luz de día, 1963 – 1963


EJERCICIOS

I

Un poema
como una gran batalla
me arroja en esta arena
sin más enemigo que yo

yo
y el gran aire de las palabras

II

miente la nube
la luz miente
los ojos
los engañados de siempre
no se cansan de tanta fábula

III

terco azul
ignorancia de estar en la ajena pupila
como dios en la nada

IV

pienso en alas de fuego en música
pero no
no es eso lo que temo
sino el torvo juicio de la luz


CONVERSACIÓN CON SIMONE WEIL

-los niños, el océano, la vida silvestre, Bach.
-el hombre es un extraño animal.

En la mayor parte del mundo
la mitad de los niños se van a la cama 
     hambrientos.

¿Renuncia el ángel a sus plumas, al iris,
a la gravedad y la gracia?

¿Se acabó para nosotros la esperanza de ser mejores ahora?

La vida es de otros.
Ilusiones y yerros
La palabra fatigada.
Ya ni te atreves a comerte un durazno.

Para algo cerré la puerta,
di la espalda
y entré la rabia y el sueño olvide muchas cosas.

La mitad de los niños se van a la cama hambrientos.

-los niños, el océano, la vida silvestre, Bach.
-el hombre es un extraño animal.

Los sabios en quienes depositamos nuestra confianza
nos traicionan.

-los niños se van a la cama hambrientos
-los viejos se van a la muerte hambrientos.

El verbo no alimenta. Las cifras no sacian.

Me acuerdo ¿Me acuerdo?
Me acuerdo mal, reconozco a tientas. Me equivoco.
Viene una niña de lejos. Doy la espalda.
Me olvido de la razón y el tiempo.

Y todo debe ser mentira
porque no estoy en el sitio de mi alma.
No me quejo de la buena manera.
La poesía me harta.
Cierro la puerta
Orino tristemente sobre el mezquino fuego de la gracia.

-los niños se van a la cama hambrientos.
-los viejos se van a la muerte hambrientos.

El verbo no alimenta.
Las cifras no sacian.

-el hombre es un extraño animal.

De Valses y otras confesiones, 1964 - 1971


JUSTICIA

vino el pájaro 
y devoró al gusano
vino el hombre 
y devoró al pájaro 
vino el gusano 
y devoró al hombre


FLORES PARA EL OÍDO

en todas partes hay flores
          acabo de descubrirlo escuchando
flores para el oído
lentas silenciosas apresuradas
flores
para el oído

caminando por la calle
que un hombre rompe con un taladro
sentí el honor de la primavera
de tantas flores
          abriéndose en el aire
y cerrándose
de tantos ecos
          negros rizados pétalos
arrastrándose
          hasta el borde del mar de tierra
          recién abierto

sé que un día de estos
          acabaré en la boca de alguna flor


MEDIA VOZ

la lentitud es belleza
copio estas líneas ajenas
respiro
          acepto la luz
bajo el aire ralo de noviembre
bajo la hierba
sin color
bajo el cielo cascado
y gris
          acepto el duelo 
y la fiesta

no he llegado
no llegaré jamás
en el centro de todo
está el poema 
intacto sol 
ineludible noche 

sin volver la cabeza
merodeo su luz
          su sombra 
animal de palabras
husmeo su esplendor
su huella
          sus restos
todo para decir
que alguna vez estuve 
atenta desarmada
                               sola 
casi en la muerte
casi en el fuego

De Canto Villano, 1972 - 1978


TERNERA ACOSADA POR TÁBANOS

podría describirla 
¿tenía nariz ojos boca oídos? 
¿tenía pies cabeza? 
¿tenía extremidades? 

sólo recuerdo al animal más tierno 
llevando a cuestas 
como otra piel 
aquel halo de sucia luz 

voraces aladas 
sedientas bestezuelas 
infamantes ángeles zumbadores 
la perseguían 

era la tierra ajena y la carne de nadie 

tras la legaña
me deslumbró el milagro mortecino 
la víspera el instinto la mirada 
el sol nonato 

¿era una niña un animal una idea? 

ah señor 
qué horrible dolor en los ojos 
qué agua amarga en la boca 
de aquel intolerable mediodía 
en que más rápida más lenta 
más antigua y oscura que la muerte 
a mi lado 
coronada de moscas 
pasó la vida

De Ejercicios materiales, 1978 - 1993

DOS POEMAS MÁS 

DAMA DE BLANCO 

el poema es mi cuerpo 
esto la poesía 
la carne fatigada el sueño 
el sol atravesando desiertos 

los extremos del alma se tocan 
y te recuerdo dickinson 
precioso suave fantasma 
errando tiempo y distancia 

en la boca del otro habitas 
caes al aire eres el aire 
que golpea 
con invisible sal mi frente 

los extremos del alma se tocan 
se cierran 
se oye girar la tierra 
ese ruido sin luz 
arena ciega golpeándonos 

así será 
ojos que fueron boca que decía
 manos que se abren y se cierran
vacías 

distante en tu ventana 
ves al viento pasar 
te ves pasar el rostro en llamas 
póstuma estrella de verano 
y caes hecha pájaro hecha nieve 
en la fuente en la tierra 
en el olvido 

y vuelves 
con falso nombre de mujer 
con tu ropa de invierno 
con tu blanca ropa de invierno 
enlutado 


STRIP-TEASE 

quítate el sombrero 
si lo tienes 
quítate el pelo 
que te abandona 
quítate la piel 
las tripas los ojos 
y ponte un alma 
si la encuentras

De Falso teclado, 2000


Tres frases de Blanca Varela
“A mí siempre me ha interesado la literatura de mujeres, siempre y, además, creo que la base de mi poesía es mucho más poesía feminista o literatura femenina en general de lo que se cree.” 

“Creo que la poesía es social en general, está dirigida al hombre, al otro que puedes ser tú mismo, porque la poesía es diálogo.” 

“Yo creo que el arte es otra dimensión de la vida. Creo que es una forma de vivir, también. El arte no es soñar exactamente, sino vivir en esa especie de lindero que tiene que ver con el sueño y la imaginación.”

En Canto villano, Poesía reunida 1940 - 1994,  Fondo de Cultura Económica, México, segunda edición 1996 / Selección de poemas Nieves Viviani (Concordia, Entre Ríos, 1973); integrante Grupo La Talita Dorada) / 
Blanca Leonor Varela Gonzales (Lima, Perú, 10 de agosto de 1926 - 12 de marzo de 2009) / 
Los autores y textos forman parte de estudio en ejercicios de taller, y su destino es solo para este objetivo.- 

jueves, 5 de enero de 2023

DANIELA CAMOZZI Tres poemas

Stefhany Rojas Wagner (Colombia), Daniela Camozzi y José María Pallaoro / 


te enfrentás

a las historias
que te obligan a contar
y en vez 
de buscar el poema afuera 
de guardarte energía 
para aquel poema 
que está en otro lado 
entre esos panes 
de tierra desmoronada*
en el fondo viscoso 
de lo que no puede decirse 
tercamente pretendés 
unirlo todo 

te enfrentás 
a la resistencia a
la imposibilidad
igual intentás
sos testaruda
querés juntar 
lo fragmentado
pero no podés

al menos 
vas a dejar
una señal ahí
en la historia que te obligan a contar

alguien 
algún día 
va a entender
que en medio de la programación
no pudiste el alto grado
nunca hay modo 
de contentar a la bestia
arriba siempre hay alguien 
que te corrige
pero sí una manchita
una rima que no debíaestarahí
el miedo a la poesía es el miedo** 

una marca 
de que la enfrentaste 
y al menos
le buscaste los ojos

no pudiste lo mucho ni lo poco
pero algo sí, una
disonancia pequeña
una pequeñísima
mota de polvo 
un insistente ruido a fritura
en la púa


* Del poema “Poder” de Adrienne Rich
** Del ensayo La vida de la poesía de Muriel Rukeyser


ahí está ella 

con sus anteojos puntiagudos 
cortando la calle 
digamos Boedo 
justo antes 
de que se haga ancha 
cartón de vino en mano
explicando su teoría 
de la pausa versal 
mientras mantiene 
todas las naranjas 
dando vueltas 
en el aire a la vez

los autos paran fastidiados 
querrían un mundo 
de eterna cinta en movimiento 
los conductores no tienen rostro 
son esos guiñapos 
de protección vial 
cabeza de gota invertida 
que impactan adrede 

ella 
los examina 
con sus anteojos de gatúbela
y les lanza que 

los poetas guardan a la poesía una lealtad 
que puede a veces entrar en conflicto 
con las exigencias de la vida doméstica*

no quiere su limosna 
ni su mirada de pena
quiere solo ese cuadrado
donde la avenida Boedo aún es angosta 
el pliegue
donde siempre es malabarista 
y recitar 
sobre el dios que vive en cada naranja

en esa naranja está lo que sentimos
pero no sabemos que lo sentimos 
hasta que se expresa*

en tanto quede 
suspendida en el aire 
cada gajo 
una teoría viva 
un poema fibra 
dando vueltas
en el cielo brilloso 
de pulpa de Boedo

* Del ensayo Esbozo autobiográfico de Denise Levertov


no sé si se terminó

la cara congelada 
el corsé de hierro 

el vestido era beige 
no 
hueso 
no 
era marfil 
bordado
de un blanco 
exactamente sucio 
indiviso

yo no sentía la presión 
o sí 
decílo


el frío era 
la presión 
       el dolor 
          el frío 
            eran 
y el blanco sucio

ya sé 
siempre supe 
lo que hacía

pero no pude detener 
los engranajes de lata
su horror delicado

qué soy yo 
sino una autómata 
pretenciosa 
que se escucha hablar 
en medio de una inmensidad
tuve que esperar 
a que ella se cansara 
a que la cuerda 
que yo misma 
me había dado 
se acabase

pero no sé 
si se terminó

la máscara 
el cemento el corsé de marfil

* De los Diarios Completos de Sylvia Plath



Daniela Camozzi y José María Pallaoro / 

Algunos de los poemas leídos por Daniela Camozzi en el Espacio Cultural Movemos, Humahuaca 3461, Abasto / Cierre X Edición del Festival Internacional VaPoesía Argentina / 29 de octubre de 2022 / 
Daniela Camozzi (Haedo, provincia de Buenos Aires, 1969) / Ph Lucrecia Handula /