sábado, 16 de octubre de 2010

Leonardo Martínez – Lo que soy toca la grandeza de la fugacidad


LOS OJOS DE LO FUGAZ

I

¿Qué música me mira?

Desde tapiales derruídos
acechan
mañanas de labranzas
viciosa siestas
atardeceres de un corazón sin muertes

¿Qué música me oprime?

Todo viene del mar o la montaña
del cielo o del abismo
Todo viene en algo dormido
anterior al murmullo de las hojas
o al grito de las bestias
encerrado en las piedras

¿Qué música está mirándome?

¿Es la música del puñal
cuando calaba hondo
y suplicabas
y tus ancas se abrían al arado de la perduración?


¿Quién compone esta música oída con los ojos?

La miro gotear en la oscuridad
y mi corazón
se escurre como lágrima
y lágrima escarchada
es mi corazón en la oscuridad

¿Qué manos acunan el candor de esa música?
¿Qué manos acunan el candor del porvenir?

Toco lo que no fui y huelo al solitario derramar en sueños
la materia de su noviazgo fértil

Lo que soy toca la grandeza de la fugacidad
En mi ceguera palpo el presente despellejado

II

Alguna música me ama
se interna sin límites
Clava sus agujas
y me susurra el secreto
del viejo maestro

Escucho

Las palabras despertarán al alba
cuando los caballos atraviesen el horizonte
y el niño sentadito ante la tropilla al galope
huela los colores terrosos azafranados negros
de reales frontinos y malacaras
perdiéndose en reflejos por el oriente
y el día se extienda levísimo
y la desconocida que llevamos en las entrañas
empiece su baile ciego
Y en una espiral sin retorno
arrastre al niño
al vértigo del principio

En: “Los ojos de lo fugaz”, Ediciones del Dock, Buenos Aires, 2010

Leonardo Martínez nació en la provincia de Catamarca en 1937. Desde hace veinte años reside en Buenos Aires.
Foto: Leonardo Martínez en Teatro El Círculo, Rosario, octubre 2010.

1 comentario:

Eduardo Espósito dijo...

Cada poema de Leonardo me genera un viaje interior y al interior, con su carga de raíz profunda. Mucha belleza. Menos mal que empezaste a publicar y si no me equivoco a escribir, no tan joven, como para darnos changüí!