viernes, 21 de junio de 2013

Silvia Castro, diecisiete


DIECISIETE


I

el público/ de los pocos
aún
que por encontrar aún, de los milagros
el asunto principal
por ser
apunte ritual de todo/ desmán precavido
hurgar por desmentir
es por lo pronto
un inicio
escribir por donde va la línea

II

desnuda/ de la mesa
abajo
dos pies de tamaño aberrante están:
la peste/ debajo
abierta de par

III

los mensajes cerrados/ ahora
aunque ahora
que la peste esté/ debajo
así es
la espuma

IV

mi tamaño/ los dos
aquí:
es el paraje
estos sordos/ después
de la muerta
pared parta/ todos los
partes allá

V

al lado suelto/ los
ladridos
oliendo a diestra
el loco/ según sueño
en cuatro parece haber un
podrido corte
de alguna
luz/ azul

VI

la espuma de la costa
según suena:
tras
soplo tras pez sin
su costra
sin orín/ para con su
trabajo marea
estos movimientos/ sonidos que
ululan

VII

pasando las de
hacia distintos/ puestos de la casa
para dejar
de Caín
brillar los dientes/ maternos
acarician
la superficie: plana de la
mano
según su/ mentira
tomando los dedos largos de
mamá
darte todo

VIII

papeles por abrir/ bajo renglón
la canoa de pescar
están
amarran a la cuarta:
falange debe ser
un desperdicio no
tirar
del cordón los diablos del
agujero, en suma
cuatro meses más
y con el resto
desdenes de este mes
aunque sin mirar
tirar

IX

tras horas de planchar
la bizca jugaba
a la
bizca doblando la armadura
por la línea
el ojo sano
hacia
el vértice mayor
tras:
un arco real
de medio punto/ el cajón
no cerraba totalmente

X

del castillo/ sentimos los
disparos
aún con su olor y
el mínimo morir/ de cabezas
posándose a mirar
sobre la
línea

XI

por fin traer de los oréganos
de sus ojos
conejos
atisbar algo más cebado
antes por oír que
por los resultados/ dejar
que reposen y
cerrar
XII
con los diablos, hay
tres posibles
uno el:
anzuelo, dos escamas a:
dorar en caliente
sin durar
hasta que cuenten
tres:
ojos rojos

XIII

jugueteando con dos/ con incisivos sobrantes
la madre
sopesa cómo/ futuras encomiendas
un poco
duro
o crudo

XIV

el minino toquetea
la parte sobrante del cajón
como si, extraño
se ve/ desde cuándo
los botes están
completos

XV

van subiendo de a dos
los disparos/ ninguno
arriba
cada vez más
nítidos

XVI

tres mendigos toman cara:
de mujer por/ detrás
su cabeza rebota/ inerte
ver
de los
escalones para no trastabillar

XVII

su cola de pez
con el anzuelo y /las marcas
de los dientes
para citar
suponen
está amamantando


En: “Tura”, El Suri Porfiado, 2012.
Silvia Castro (Río Negro, 1968). Reside en Buenos Aires. Poeta y fotógrafa

No hay comentarios: