EL GIGANTE DE OJOS AZULES
Un
gigante de ojos azules
amaba
a una mujer pequeña
cuyo
sueño era una casita
pequeña,
como para ella,
que
tuviera al frente un jardín
con
temblorosas madreselvas.
El
gigante amaba en gigante,
su
mano, a grandes obras hecha,
mal
podía construir los muros
ni
usar el timbre de la puerta
de una
casita con jardín
con
temblorosas madreselvas.
El
gigante de ojos azules
amaba
a esa mujer pequeña
que
pronto se cansó, mimosa,
de tan
desmesurada empresa
que no
concluía en un jardín
con
temblorosas madreselvas.
Adiós,
ojos azules, dijo.
Y, con
graciosa voltereta,
del
brazo de un enano rico
penetró
en la casa pequeña
que
tenía al frente un jardín
con
temblorosas madreselvas.
El
gigante comprende ahora
que
amores de tanta grandeza
no
caben ni siquiera muertos
en
esas casas de muñeca
que al
frente tienen un jardín
con
temblorosas madreselvas.
ME CERRARON TODAS LAS
PUERTAS...
Me cerraron
todas las puertas
todas las cortinas
ni un pañuelo de azul
ni un puñado de estrellas
todas las cortinas
ni un pañuelo de azul
ni un puñado de estrellas
Amor mío, ¿es que va a sorprendernos aquí la muerte
sin que podamos salir de esta ciudad?
(Leipzig, 3 de agosto de 1959)
TODO LO QUE ESCRIBÍ SOBRE
NOSOTROS ES MENTIRA
Todo lo que escribí sobre nosotros es mentira
No es lo que fue sino lo que yo quise
mi nostalgia detenida en inalcanzables ramas
mi sed extraída del pozo de mis sueños
bocetos alumbrados
Todo
lo que escribí sobre nosotros es verdad
tu belleza
o sea una cesta de frutas una mesa en el campo
cuando me faltás
tu belleza
o sea una cesta de frutas una mesa en el campo
cuando me faltás
o sea
cuando me convierto en la última luz de la calle
del último rincón de la ciudad
cuando tengo celos
del último rincón de la ciudad
cuando tengo celos
o sea
cuando corro de noche entre los trenes con los ojos vendados
mi felicidad
o sea río soleado que rompe sus diques
mi felicidad
o sea río soleado que rompe sus diques
Todo
lo que escribí sobre nosotros es mentira
todo lo que escribí sobre nosotros es verdad
todo lo que escribí sobre nosotros es verdad
(Leipzig, 30 de septiembre de
1960)
LA NIEVE CORTÓ EL CAMINO...
La
nieve cortó el camino
No estabas
No estabas
Me
senté con las piernas cruzadas
contemplando tu rostro
con los ojos cerrados
contemplando tu rostro
con los ojos cerrados
No
pasaban barcos
no
volaban aviones
No estabas
y permanecí apoyado en la pared
hablando y hablando
sin abrir la boca
No estabas
y permanecí apoyado en la pared
hablando y hablando
sin abrir la boca
No
estabas
mis manos te acariciaban
y me tapé la cara con las manos
mis manos te acariciaban
y me tapé la cara con las manos
(diciembre de 1959)
ME ACOSTUMBRO A ENVEJECER…
Me
acostumbro a envejecer,
es el
oficio más difícil del mundo,
golpear
puertas por última vez,
la separación para siempre.
la separación para siempre.
Horas
que corren, corren, corren…
Intento comprender a costa de dejar de creer.
Intento comprender a costa de dejar de creer.
Te quise
decir una palabra pero no pude.
En mi
mundo el sabor de un pitillo por la mañana
con el
estómago vacío.
La
muerte antes de llegar me envió su soledad.
Envidio
a los que no se dan cuenta de que envejecen,
tan ocupados están con sus cosas.
tan ocupados están con sus cosas.
(12 de enero de 1963)
SOBRE LAS LLUVIAS RADIACTIVAS
Cierren
bien las ventanas
no dejen a los chicos en la calle
no dejen a los chicos en la calle
las
lluvias llevan la muerte a las semillas
llueve podredumbre
llueve podredumbre
Tenemos
que limpiar las lluvias
tenemos que sacar brillo de nuevo a la lluvia como si fuera plata
tenemos que sacar brillo de nuevo a la lluvia como si fuera plata
que
las lluvias lleven de nuevo nada más que el sol a las semillas
que los chicos puedan correr de nuevo bajo la lluvia
que los chicos puedan correr de nuevo bajo la lluvia
y que
podamos abrir de nuevo las ventanas a la lluvia
(23 de abril de 1963)
EL MÁS HERMOSO DE LOS MARES
El más
bello de los mares
es
aquel que no hemos visto
La más
linda criatura
todavía
no ha nacido
Nuestros
días más hermosos
aún no
los hemos vivido
y lo
mejor de todo aquello que tengo que decirte
todavía
no lo he dicho
Para
esta selección de textos tomé la traducción del francés de Amaro Villanueva que
es la que frecuenté en mi juventud (Antología
poética, Editorial Quetzal, Argentina, primera edición de 1968), la traducción
directa del turco de Fernando García Burillo (Últimos poemas, Ediciones del oriente y mediterráneo, España, 2000),
y anotaciones en cuadernos y libretas.
Nazım
Hikmet Ran (Salónica, Imperio otomano, 20 de noviembre de 1901 - Moscú, 3 de
junio de 1963). (Hay alguna discrepancia acerca de la fecha de nacimiento. En un
poema NH dice que nació en 1902). Foto: Jmp
2 comentarios:
Adoro este tema.
Soledad, coincidimos.
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