EL
SOLDADO MUERTO
Desde
tu mano sube
el
fusil como un lirio congelado.
¡Qué
diferente de las otras muertes
tu
muerte de soldado!
Por
tus ojos abiertos
pasa
el aire, y el cielo se detiene…
¿Quién
cerrará tus ojos
¡ay!
antes que esta hierba te encadene?
Nadie
busca tu voz.
Solamente
ese viento sin colores
que
te seca la sangre,
sobre
tu piel violácea arroja flores.
BALADA
DEL PÁJARO HELADO
Presentía
que tú eras mi triste
corazón
en el aire cantando,
y
miraba tu vuelo apacible
a
través del ocaso pintado.
Se
difunde tu muerte en el viento,
tu
mutismo violáceo se hiela,
y
no sé si te llevo en mi seno
o
has quedado tendido en la hierba.
Ya
no habrás de cantar bajo el oro
que
en los álamos bebe la noche,
y
por eso se ahueca un sollozo
en
tu nido redondo del bosque.
Mientras
gime la hora amarilla
disminuyes
en planos de frío.
¡Ay,
que nunca creí que cabía
un
silencio de muerte en tu trino!
PRIMAVERA
¿Qué
suma de ternura
es
esta que me llega
por
invisibles calles
y
pájaros me entrega?
Una
fragancia ruda
de
sol y golondrinas
desgarra
la mañana
y
cubre sus colinas.
Y
junto al nuevo surco
que
en humedad se enciende
¿qué
cercano deseo
de
espigas me sorprende?
Es
dócil el sendero
y
el horizonte cierto
y
ya se mueven nubes
redondas
sobre el huerto.
¿Qué
suma de hermosura
es
esta que refleja
en
mi mano la forma
de
la primer abeja?
En
Umbral de Tierra, Ediciones Conducta
(del Teatro del Pueblo de Buenos Aires), 1942
María Granata nació en Buenos Aires el
3 de septiembre de 1920 (o 1923)
“En
1942 María Granata da a conocer su primer libro de poemas, Umbral
de tierra. La edición
fue auspiciada por la revista Conducta, una
publicación del Teatro del Pueblo, fundado en 1930 por Leónidas Barletta,
institución que llevaba a cabo un amplio programa de extensión cultural. Este
libro inicial de la autora no pasaría desapercibido en el panorama poético de
la época; obtuvo dos destacados reconocimientos: el segundo premio de poesía de
la Municipalidad de la ciudad de Buenos Aires, y el Martín Fierro, otorgado
éste por la Sociedad Argentina de Escritores, distinciones que situaron a María
Granata en un lugar de referencia entre los poetas de la denominada Generación
del cuarenta...” (Esteban Moore, en Letralia
Tierra de letras, número 183, 17 de marzo de 2008)