DESIERTO
1
Lejos de
las rompientes y las orillas
las
aguas erizadas de escamas.
Ahora lo
espera
el
polvo rapaz de los caminos
la
imposible belleza de la sed.
Ahora los
espera
un mar
quieto que llaman desierto.
2
Piedra,
viento, coirones
centelleante
se
desliza el Limay
hacia
el Atlántico.
El aullido
del viento
murmura
la despedida.
Sus manos
dejan de escapar
entre
los dedos
el
deseo transparente.
Dentro
suyo algo se agita
como
los pajonales de la orilla.
Bajo la
luz vertical
los
pies sumergidos
se afirman
sobre la piedra.
…donde
yo sólo sea
memoria
de una piedra sepultada entre ortigas…
Luis
Cernuda – “Donde habite el olvido”
3
Un viento
oblicuo
roe
los contornos de las cosas.
En un
cruce de caminos
envuelta
con su collar de ortigas
espera
la memoria.
ESPEJO
Soy esa
orilla
que
duplica
el
agua
y que
un leve
aliento
del
aire quiebra.
Como si
la tersa
superficie
de la apariencia
se
revelara,
como
si la tensa
superficie
de la
apariencia
se
rebelara.
MEMORIA
Una ráfaga
constante
roe los
bordes de las cosas,
deja sólo
una imagen
borrosa
a la
caza de una sombra.
En Poesía Río Negro. Antología Consultada
y Comentada Volumen 1, Fondo Editorial Rionegrino, Viedma, Río Negro, 2006. De la
compilación: Raúl Artola.
Luisa Peluffo (Buenos Aires, 20 de
agosto de 1941). Desde 1977 reside en San Carlos de Bariloche). Foto: Jmp
No hay comentarios:
Publicar un comentario