PARA GANAR EL PAN
el
poeta no
encuentra
el poema en el aire y lo caza
el poema no es un pájaro / el poeta no
recibe visitas clandestinas de números graciosos
que se instalan en su egregia cabeza
iluminándola / el poeta es
como un viejo minero solitario y muy terco
que arrastrando su mula
penetra cada día al socavón pico pala esperanza
golpe a golpe a la piedra tras la eterna quimera
e igual que los mineros
son muy pocos los que dan con la dorada veta / pero
una vez y otra vez pico pala esperanza
tras la eterna quimera
golpe y golpe a la piedra jornada tras jornada
pisoteando palabras el aire enrarecido
polvo sobre la frente
sudor lucha trabajo / el poeta es
como el viejo minero
que acostumbra morirse
abrazado a su mula a su pico a su pala.
encuentra
el poema en el aire y lo caza
el poema no es un pájaro / el poeta no
recibe visitas clandestinas de números graciosos
que se instalan en su egregia cabeza
iluminándola / el poeta es
como un viejo minero solitario y muy terco
que arrastrando su mula
penetra cada día al socavón pico pala esperanza
golpe a golpe a la piedra tras la eterna quimera
e igual que los mineros
son muy pocos los que dan con la dorada veta / pero
una vez y otra vez pico pala esperanza
tras la eterna quimera
golpe y golpe a la piedra jornada tras jornada
pisoteando palabras el aire enrarecido
polvo sobre la frente
sudor lucha trabajo / el poeta es
como el viejo minero
que acostumbra morirse
abrazado a su mula a su pico a su pala.
De:
“Esquinas silenciosas”, Cuba, 1990 (Premio Casa de las Américas).
Foto:
Estación Quilmes http://estacionquilmes.blogspot.com.ar.
Carlos
Patiño nació en Buenos Aires en 1934 (y falleció hoy, 10 de junio, a la edad de
79 años). Poeta y novelista. Algunos de sus libros: “Buenos Aires por la
cabeza”, 1966. “Hombre de doce menos cuarto”, 1968. “Retratos”, 1975.
“Ceremonia (y otros desórdenes)”, 1985. “Esquinas silenciosas”, Cuba, 1990
(Premio Casa de las Américas).
se supone que la Parca no se detiene nunca y que eya tembién porta pala, pico y esperansas de dejar a este Mundo sin Poesía ni Poetas ( esos malhadados trabajadores de la memoria implacable! ) Patiño se fue y nos deja una estela de trabajo empenioso, dedicasión pasiente, larga espera hasta que la pesadiya acabe y se transforme en un dorado suenio igualitario para Tod@s. Memoria y Salud y Poesía para vos, querido hermano! poni
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