LA DISTORSIÓN CAMBIA LA HACHE
(11
reescrituras de Discépolo)
1
LA MUERTE DEL FAKIR
La
risa de las cosas
que soñara el fakir en el pasado
mira al fakir.
El fakir se planta
para mirarla: a un paso.
-Plantarse aquí-
que soñara el fakir en el pasado
mira al fakir.
El fakir se planta
para mirarla: a un paso.
-Plantarse aquí-
Pero
el faquir cachado por la risa
de las
cosas
que
soñara
da un
paso más:
y
muere de la risa.
2
EL FALLO DE LA SUERTE
El girar
hace ladrar.
Lo que
espera el que espera
gira
en el girar
y
ladra.
El que
espera es sordo. Y
es
ciego. Y gira ladrando.
Lo que
espera el que espera
es
ciego. Y es sordo.
El que
espera
y lo
que espera el que espera
giran.
Y ladran
hasta
quedar secos.
4
LA DISTORSIÓN LLAMA A LA HACHE
La distorsión
llama a la h. febril. vamo’. el
llamado
o llama-hado. el llama-hola. es
igual.
vamo´. Febril. el llama - ¿hola?. Igual es.
y dale.
el llamado
a lo
nomás. el llamado. y
dale.
o llama-horno. es igual. Febril. o
llama-helado.
¡nos vamo’!
nos
va.o vaho. allá. el llama-hado:
¡al
horno nomás! el llama- ¡hola ¡
o
llama. ¿hola?: es igual. al horno nomás.
a un
lao. y dale. a un lao. el
llama-horno
al horno. vamo’. que va. qué va. igual es.
el
llama-helado al horno nomás. el va o va-ho
o va- ¡oh!
Igual. igual es. nos vamo’. y
¡dale!
Allá. nos vamo’ al horno. al
horno
nomás. que llama. Febril. Llama. qué llama.
a la h.
llamada. Llamado. igual es. al horno
nomás.
nos vamo’ nomás. Llama. Llamále. Llamá:
-llamále
hache
-llamále
hache
5
LA DISTORSIÓN CAMBIA LA HACHE
La distorsión
cambia la h. Así, hoy resulta
que es
lo mismo que oyh o que ohy: en la
fragua
del distorsionar. En Lo Mismo. Porque
tanto
da como no da. Magma neutro
del
da: del da lo mismo.
Pero quizás
hay que sacar el hoy. El hoy es
quizás
sólo una manera de decir hoy. El hoy
quizás
no es necesariamente hoy. El hoy es
quizás
sólo una palabra que se neutraliza con
otra
palabra: con quizás. Que se borra con otra
palabra:
con quizás.
¿Y
magmarse neutro en tanto?
¿Distorsionarse
un ser?
¿Fraguarse
un ser en da lo mismo?
¿Resultarse
o resultar ser para un hoy que
hay
que borrar?
¿O
resultarse o resultar ser para borrar el
hoy
que es sólo un hoy?
-Cambiá
la hache
-Cambiá
la hache
6
LA DISTORSIÓN BORRA LA HACHE
La
distorsión borra la h:
a
abido borra a ha habido. Erida borra a
herida.
Onrao borra a honrao. Y
mesclados
ves:
herida
con erida. Honrao
con
onrao: en la borra del borrar.
Erida irrespetuosa
con honrao. Onrao
irrespetuoso
con herida: ves mezclados.
Ha habico
con a abido
mezclados
en la borra. Y
llorar
ves: honrao
contra
onrao. Y herida contra erida: llorar ves
en la
borra. Y ha habido contra a abido: ves
llorar.
Mezclados ves. Mezclados en
la
borra irrespetuosa del borrar
que
borra la h.
-Borrá
la h
-Borrá
la h
7
EL GAYO FANÉ
El
gayo Fané
en la madrugada:
visto en la madrugada
por la fiera del tiempo que
lo chifla.
La fiera del tiempo
chifla al gayo Fané
y la hace ver:
la Belleza cascajo. Teñida.
la Belleza chueca. la Belleza
dos cuartas. picoteada.
cachivache.
La Belleza percha. Des-
cangayada. la Belleza
nuez: bajo. deshecha.
El gayo Fané
en la madrugada
chiflado por la
fiera del tiempo
se ve:
un mendigo
un desplumado
un ruin
un de rodillas.
en la madrugada:
visto en la madrugada
por la fiera del tiempo que
lo chifla.
La fiera del tiempo
chifla al gayo Fané
y la hace ver:
la Belleza cascajo. Teñida.
la Belleza chueca. la Belleza
dos cuartas. picoteada.
cachivache.
La Belleza percha. Des-
cangayada. la Belleza
nuez: bajo. deshecha.
El gayo Fané
en la madrugada
chiflado por la
fiera del tiempo
se ve:
un mendigo
un desplumado
un ruin
un de rodillas.
El
chiflido
de la fiera del tiempo
en la madrugada. el chiflido
que hace ver. que chifla.
El suicidio
del gayo Fané:
chiflado.
de la fiera del tiempo
en la madrugada. el chiflido
que hace ver. que chifla.
El suicidio
del gayo Fané:
chiflado.
8
UNA FLOR EN LA TORMENTA
El
perdido busca en la tormenta
un nombre para el Sin Nombre. Y para probar
nombra un nombre.
El que en un esfuerzo interminable
aprendió a vivir sin nombre
aúlla su tormento
y se tambalea en el nombre
que para probar
nombró el perdido.
El Sin Nombre
se pierde en el nombre
para su ningún nombre. Y tambalea
en la tormenta de su aullar: perdido
en la tormenta
enseñando una flor nacida
del tormento de su esfuerzo interminable
para probarse Dios
un nombre para el Sin Nombre. Y para probar
nombra un nombre.
El que en un esfuerzo interminable
aprendió a vivir sin nombre
aúlla su tormento
y se tambalea en el nombre
que para probar
nombró el perdido.
El Sin Nombre
se pierde en el nombre
para su ningún nombre. Y tambalea
en la tormenta de su aullar: perdido
en la tormenta
enseñando una flor nacida
del tormento de su esfuerzo interminable
para probarse Dios
:en la tormenta
buscando perdido
al que perdido lo pierde
nombrándolo así
con ese nombre.
buscando perdido
al que perdido lo pierde
nombrándolo así
con ese nombre.
10
LA MUERTE DEL AMOR
El Amor
nadando
en la sopa
cuenta
monedas
-plata
-plata
-plata.
Un disfrazado
sin
carnaval
pasa
comiendo
tajadas
de aire y dice
que va
a arreglar
el
mundo.
-Pero
no tiene colchón-
El
Amor
lo
llama. Y el disfrazado
le
dice tanta
pavada
que el
Amor
se
ahoga en la sopa.
En
Verme y 11 reescrituras de Discépolo,
Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1988.
Leónidas
Lamborghini (Buenos Aires, 10 de enero de 1927 - 13 de noviembre de 2009).
Foto: Jmp
1 COMO LEÉS, ESCRIBÍS. ENTREVISTA A LEÓNIDAS LAMBORGHINI
ResponderEliminar(Fragmento) Sergio Raimondi / Universidad Nacional del Sur / Cuad.Sur, Let. n.34 Bahía Blanca 2004
“Acá entramos al otro tema, de la lectura. Como leés, escribís. Y si el tipo es un lector, por más profuso que sea, pero es miope, no va a hacer una lectura productiva, no va a ver todo lo que en esa escritura hay y todo lo que cambia a través del tiempo, de que no es una lectura, de que son varias lecturas. En términos del arte de las variaciones, vos te ponés a leer El Quijote y podés estar toda la vida. O la Biblia. Y podés estar toda la vida. Porque tus lecturas van a ser diferentes. Y está la lectura miope, de los que no ven más allá de lo que están leyendo. No ven más allá de lo que están leyendo. Cuando es una partitura, el texto. Una partitura... y cada uno interpreta, ¿no? Y está el Beethoven de Toscanini y está el Beethoven de no sé quién otro. Así. Pero tenemos que lograr esa flexibilidad. No ponernos duros. El estereotipo es invencible, es invencible, pero... Un día leo esto de Coleridge, cuando dice, hablando de las obras maestras entre comillas, dice que ninguna piedra se ha de mover de estas pirámides, porque una sola que se mueva... Es decir, la Perfección. Y ahí está la impostura, la mentira, la imposición, la autoridad del Modelo. Entonces te podés pasar mil años diciendo que la tierra es el centro del universo. Mil años. Porque el modelito ese funciona... Pero no fue así. Como no son así tantas cosas... Por eso hay que permanentemente investigar, criticar al Modelo. Y esto es lo político también. Porque sí, podés partir de un modelo, pero si no hacés la crítica del modelo, te pasa lo que nos acaba de pasar. Todo bien, todo bien, pero... en el momento en que hay que corregir, no, porque es más cómodo quedarse ahí, y te matan. Entonces yo me dije: "Voy a cambiar todas las piedras del modelo. A ver qué pasa". Entonces empecé a trabajar con los sonetos de Quevedo, con los de Garcilaso, con todo el siglo de oro... Y bueno, la posteridad dirá. Góngora lo hizo con el Polifemo y Galatea... Y parecen juegos. Lo que más me gusta es que parece un juego, y que parece un juego que no conduce a nada. Hay un juglar, famoso, que empieza un poema, la primera línea: "Quiero hacer un poema sobre la nada"... Pero las implicancias de estos juegos son fuleras, es un confín, porque yo mismo lo he experimentado. Te decís: "¿Y después de esto qué?". Aunque también he visto que el Modelo, consagrado, pero sobre todo estereotipado y sacralizado, vive de nuevo. Toma una nueva vida esa momia. La Momia empieza a andar otra vez.”
2 COMO LEÉS, ESCRIBÍS. ENTREVISTA A LEÓNIDAS LAMBORGHINI
ResponderEliminar(Fragmento) Sergio Raimondi / Universidad Nacional del Sur / Cuad.Sur, Let. n.34 Bahía Blanca 2004
“Cuando digo que la gauchesca sin la risa no es tal, entonces van por los contenidos... Y no..., el alma, el alma de ese género, es esa risa maliciosa, esa risa paisana. Le sacás eso y no hay gauchesca. Cuando dice un paisano: "¿Quién sabe cuándo vamos a ser libres?" Lo dice a diez años de la revolución de mayo. Y el otro paisano le dice: "Sí, cuando hable mi mancarrón...". ¿Qué te parece? O cuando dice: "Mire, amigo, esto, ya del principio fracasó"; y es 1820. El diálogo patriótico, a diez años de la revolución. Pero eso de que "cuando hable mi mancarrón", ¿no te suena a algo? A Discépolo, cuando dice: "que un día cansado me puse a ladrar".
“Porque Discépolo cifró lo que uno quiere decir. Dice: "Tanto dolor que hace reír". ¿Cómo batís eso? "Tanto dolor que hace reir". O en un tango que está con su novia, un tango de esos, dice: "Somos la mueca de lo que soñamos ser". O el mismo "Cambalache", para llegar al lugar común. Yo he leido algo parecido en Ezra Pound. Pero Discépolo es superior. En las figuraciones que encuentra es superior. La decadencia total de una cultura y de una civilización. Es como la réplica, el chiste que hay en la primera parte del Martín Fierro donde, para tener un poco de calor humano y qué sé yo, se tienen que ir de la civilización a lo salvaje.”
“Fijáte este otro... "Crepúsculo interior"... parece Baudelaire.”
3 COMO LEÉS, ESCRIBÍS. ENTREVISTA A LEÓNIDAS LAMBORGHINI
ResponderEliminar(Fragmento) Sergio Raimondi / Universidad Nacional del Sur / Cuad.Sur, Let. n.34 Bahía Blanca 2004
“Quién que ha sido grande no se ha reído. Dante, cualquiera... Shakespeare. Y el primero de todos, Sófocles... con su Edipo. Es un chiste. Shakespeare se ha reído todo el tiempo, se ha reído en Otelo, en Hamlet, en Rey Lear... Sí, es una tragedia, pero lo que se ha descubierto ahora es que la tragedia terminó. Kakfa es cómico; del principio al fin. Pasa que el bufón controla la locura. El bufón controla la locura del Rey Lear. O de cualquier rey que se le ponga. Por eso cualquiera que llega al poder necesita bufones al lado. Si los tiene para que lo controlen... Ahora, si los tiene para pegarles una patada de vez en cuando, no... pero yo creo que Lear, si tiene alguna cosa de interés ese personaje, es que es inteligente, porque él cuando le falta el bufón dice: "¿Dónde está el Loco?" "El Loco", le llama 8. Necesita al Loco, cuando se la ve venir. El pide por el Loco, para tenerlo al lado y que le diga...”
“El yo lírico no admite la risa. Porque ver lo trágico desde lo trágico, bueno, fenómeno. Pero ver lo trágico desde, como en "La Refalosa" de Ascasubi, con esa risa... Es una risa fuera de lugar. Es por ejemplo lo que pasa con Olivari, en La musa de la mala pata. Es eso. "La orquesta de señoritas"... De pronto se desbarranca, pierde el ritmo 9, y después retoma, claro... Y ese tipo de lirismo facilón, que yo creo que ya no funciona, pero con el que uno se las tuvo que ver, porque "Esto no es poesía", "Usted usa la poesía para mancillarla", todo eso me lo tuve que... Y tuve que seguir. Eso es lo que rompe las pelotas en Shakespeare: cuando se pone a hacerse el poeta, a hacerse el poético, ¿no? Cuando empieza: "Oh, la luna amada y..." Esa cosa, esos colgajos, insoportables. Hay que re-escribirlo todo de nuevo. Pero no por ejemplo cuando dice, en el Otelo, que se quiere acercar Casio a Otelo, cuando se aclara la intriga donde Casio ya aparece como que le está haciendo los cuernos a Desdémona y era el tipo más querido por Otelo, y Yago dice: "Pero acércate, tú eres amigo del jefe de tu jefe", que es la esposa, la mujer 10. Ah, la mujer es la que está detrás del poder. El hombre es un... instrumento. Es poderosísima.”
“Una tradición que viene de la gauchesca, de "El Matadero", del grotesco, de los hermanos Discépolo, de Defilippis Novoa, todo ese teatro chico que se le llamó, que se son unos genios... El Estado debería tener un teatro. "He visto a Dios", de Difilippis Novoa. "El Guapo del 900". Todo lo de Armando Discépolo. Pero claro, estamos... el Mercado manda. Hoy es el valor del mercado. Por ejemplo el folletín no ha perdido para nada. Lo ves en la televisión: el malo, el bueno, y sigue la historia. Es una forma. La gente la ve, porque la necesita. Lo necesita. Está bien... Y son unos disparates, una demagogia, un oportunismo... El folletín es imbatible. Está el malo y está el bueno. Y vos ya sabés que el bien va a vencer al mal. Ya te quedás tranquilo.”