COMO LLUVIA
un espejismo
era la nave
en la otra orilla
los sonidos crecían
deformados
como lluvia de
balas
filtrándose por las
goteras,
la proyección
errónea
de una luz
no cesaba de
convertir
una pequeña sombra
en algo
trascendente,
pero yo iba,,,
COSTADO OSCURO
Y qué con éste
costado oscuro
que me crece y
crece
zarpó
en un barco negro
no sé de dónde,
cargaba sangre
de otras guerras
tan negras como
éstas
habían rodado
las cabezas y algún
circo,
un payaso murió
con los ojitos
en cruz
y ya no pudo
el gesto contar
la historia
me lo dijeron
los salvados
para siempre,
los restos de piel
y mugre
que viajan
en las cañerías de
una
ciudad moderna,
lo repito yo
y me pregunto,
qué hacer con éste
costado oscuro
que me crece
y crece,,,
ORFANDAD
me miraba,
yo lo vi
con mis ojos de
antes:
me vio
en el tramo final
de esta vaguedad
a solas,
la mano me temblaba
un poco,
la pupila incierta,
me vio como una
sospecha
de su orfandad
apenas,
éste hijo
que me carga a
cuestas,,,
ADEENE
revisa el
historial,
la esperma
trasegada
en estirpe ajena,
oye el miedo,
su tintineo
horadando
las sienes,
el eco
le estruja el
adeene,
(dónde te olvido
abuela
-que no hubiste
de moño rosa
la puerta
ni cuna-
en qué batalla
te quito los besos,
devuelvo tus
cuentos,
gateo hasta
la saqueada noche
y, sin disgregarme,
regreso)
revisa
el historial,
caleidoscopio
de otro cielo,
ronda de
sombras
en una
tiniebla
lejos,
otros árboles
guardan la
infancia,
ella no está ahí,
no juega,
no se salva,,,
COMO HIEDRA
como hiedra
va trepando en
mi
garganta,
se desliza
por mi lengua,
brota empecinada
en mi boca
dice basta,,,
LENGUAJE
todo anuncia el
declive,
ese ronroneo fatal,
el desaliento
la palabra
imparcial
que no me elige
su huésped
Me quemo en el
fuego
de unas islas
perdidas como
yo,
así desiertas,
mi lengua cae
en trampas
aburridas
una cuerda al vacío
es mi garganta,,,
BRINCA, BRINCA…
…como potranca,
no da respiro
ni amordaza,
en cada cabriola
brota savia
sin beso ni
amor
que le rebote
el hombre
mira el reloj,
ve la casa,
la mujer
que aguarda,
un silencio
lo proscribe,
se quita el
olor
apenas,
apenas
ensaya un olvido,
ella se viste
rápido,
fui una niña
en esta pausa,
qué más pedirle
a un hombre bueno,
dice,,,
DE RAYO EN FIESTA
yo quiero
una instantánea
como de rayo
en fiesta
que me obnubile
un poco,
me
trastabille
-y caiga
/a las doce en
punto-
la calabaza
a tiempo/
sin cables
ni tubos
ni hilos blancos
de sábana,
devolviéndome
a la oquedad,
ya libado
el desempeño
y que lloren
los deudos:
unos,
otros
que rían
hasta
rozarme,,,
En: “De rayo en fiesta”, Ediciones Tahiel,
2013. Selección de textos: Jmp.
Gracias, Alicia, por tu libro.
Alicia Pastore (Buenos Aires, 1049).
Foto: AP en FB.